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cataratas para alimentar las susodichas centrales eléctricas representa hasta un ... 75/oo del caudal que pasaría naturalmente por las cataratas.

En verano, o sea en la época turística, y ello, en las horas del día solamente, le hacen el favor a las cataratas de dejarles el 50/oo de su caudal natural; pero en verano de noche, cuando los turistas duermen, y fuera de la época turística, las 24 horas del día, les dejan solamente el 25/oo.

Por otra parte, hay que reconocer que, como esta corriente de agua de los Grandes Lagos es muy estable en su caudal, este caudal aun reducido artificialmente a 25/oo, puede ser que no sea menor que el caudal natural en otras cataratas en época de sequía. De todos modos, es así que las vimos hoy porque el 16 de diciembre ciertamente no es época turística por aquí. De tal manera, lo que la gente admira como una maravilla natural es en realidad un espectáculo manipulado para los turistas.



Las cataratas

Estas cataratas, se las puede observar tanto desde el lado vespucciano como desde el lado canadiense. Desde el lado vespucciano, se las ve más de perfil, de manera que no se puede ver toda la extensión de la caída. Desde el lado canadiense, se puede observar las cataratas de frente, o sea que se las ve en toda su extensión. Pero, según hemos podido notar, la vista es más característica desde el lado vespucciano, porque, desde el lado canadiense, si bien se ve todo, se lo ve de lejos y de una manera que se podría llamar bidimensional, mientras que, desde el lado vespucciano, se nota mucho mejor el volumen del agua que cae, el movimiento del agua que cae, la manera en la cual cambia su flujo de horizontal a vertical - o sea, desde el lado vespucciano, el espectáculo es mucho más dinámico y tridimensional; además que también se ve mucho mejor los rápidos que existen en las aguas inmediatamente antes de las caídas.

En resumen, una vista agradable para la familia, si bien de ninguna manera a la altura de la fama que tiene; y ciertamente de ninguna manera a la altura de las cataratas del Iguazú - la diferencia entre las cataratas de Niagara y las del Iguazú no es solamente en tamaño y en complejidad de las caídas a favor de Iguazú sino también, y de manera muy importante, en los alrededores respectivos: mientras los alrededores del Iguazú son, o eran, y esperamos que todavía son, naturales, de selva, los de Niagara son una camisa de pavimento, edificios, y todo lo demás urbano que niega la naturaleza.

Viajando ahora hacia el sur, hacia el lago Erie propio.

Suburbios de la ciudad de Buffalo. Interminables empresas industriales sobre kilómetros tras kilómetros a ambos lados de la carretera. Podemos ver con toda claridad donde se fabrica la contaminación ambiental que todos deploran, pero que sigue no más; es todo un cuadro de por sí todas estas chimeneas, por docenas, escupiendo sus espesas nubes de humo.